Oh, Dios de amor y compasión, te agradezco por el regalo de la vida y la salud. Te pido que bendigas esta semana que comienza, que me concedas la fuerza y la energía para afrontar cada desafío con alegría y determinación. Guíame en mis decisiones para que siempre elija lo que me nutre y me fortalece.
Protege mi cuerpo de enfermedades y dolencias, y llena mi mente de pensamientos positivos y esperanzadores. Ayúdame a encontrar el equilibrio entre el trabajo y el descanso, y a disfrutar de cada momento con gratitud.
Que mi corazón esté lleno de amor y bondad, y que mi espíritu esté siempre conectado contigo.
Amén.